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¿Es tan importante evitar los químicos en los cosméticos?
Lo primero que te podrías preguntar al comenzar a leer este artículo sería ¿Tan importante es que mi cosmético sea natural y contenga conservantes naturales? ¿se está exagerando todo esto? ¿es una moda pasajera? Sólo te ofreceré algunos datos objetivos, y serás tú, quien contestes esas preguntas. En definitiva, tu cuerpo es tuyo, y tu salud está esencialmente en tus manos.
Para comenzar, veamos cómo está el panorama cosmético en nuestro mundo:
Recientemente han surgido varias noticias preocupantes sobre la relación entre conservantes químicos en cosméticos y el riesgo de Cáncer. Uno de los casos más alarmantes es el descubrimiento de niveles elevados de benceno -un conocido carcinógeno- en productos para el acné.
Estudios clínicos reiterados han demostrado que el peróxido de benzoilo se descompone en benceno, especialmente cuando se expone a altas temperaturas, lo cual puede ocurrir fácilmente en entornos como un baño, bajo el sol en verano o incluso dentro de un coche donde percibas sensación de calor. Esto no sólo representa un riesgo al aplicarse en la piel sino, por si fuera poco, también por inhalación, debido a que el benceno puede penetrar y traspasar incluso envases sellados.
Como puedes ver en esta noticia de actualidad, de marzo de 2024, en este periódico de dermatología clínica, se encontró benceno en varios productos para el acné de las principales marcas comerciales, incluidas: Proactiv, Clinique, Clearasil y más. Ante esto, se ha presentado una petición ante la FDA para retirar estos tratamientos por su peligro inminente de generar cáncer en población joven, ya que la mayor parte de las personas afectadas por acné son jóvenes en estado de alteración hormonal.
Las pruebas también observaron el benceno en el aire que rodea los tratamientos para el acné y encontraron que, incluso un producto de la firma Proactiv, sin abrir, filtraba altos niveles de benceno cuando se mantenía a la temperatura de una ducha caliente, durante aproximadamente 17 horas. Es decir, estos productos en el baño, estarían lanzando benceno al aire durante días ¿y qué ocurriría en establecimientos donde están las estanterías, repletas de estos cosméticos, a la espera de ser vendidos?
Éste no es más que un ejemplo de los muchos ingredientes químicos, incluidos en los cosméticos, con un claro efecto nocivo para la salud. Otro ejemplo común son los parabenos y los ftalatos, comúnmente utilizados como conservantes, que han sido identificados como disruptores endocrinos. Los parabenos imitan la función del estrógeno, lo que aumenta el riesgo de Cáncer de mama. Los ftalatos, por su parte, están asociados con defectos de nacimiento y problemas reproductivos, así como con un riesgo incrementado de cáncer.
Como vemos en el siguiente documento “Muchas empresas de cosméticos argumentan que el nivel de una sustancia química nociva en cualquier producto no es suficiente para causar daño, basándose en estudios de exposición química en adultos. Sin embargo, la ciencia está descubriendo que el momento de la exposición es crucial y que incluso una dosis muy pequeña de algunas sustancias químicas puede tener consecuencias graves en niños y mujeres jóvenes que aún están en desarrollo.”
En respuesta a estas preocupaciones, la Unión Europea, ya prohíbe (o regula la cantidad máxima) de más de 2,500 químicos en cosméticos por sus potenciales riesgos para la salud, pero muchos de los cosméticos que compramos son de marcas estadounidenses.
En la actualidad, el Estado de California está liderando iniciativas legislativas para prohibir peligrosos químicos cosméticos. Este Estado aprobó un proyecto de ley que prohíbe 26 sustancias químicas vinculadas con el cáncer, daños genéticos y otros riesgos para la salud. Esta medida sigue el ejemplo de Europa, pero con mucho tiempo de retraso.
Aun es muy deficitaria la regulación en el Mundo en general; incluso en Europa, con respecto a los químicos cosméticos porque es sabido la necesidad de regular y prohibir casi la totalidad de estos conservantes e ingredientes químicos.
¿Y por qué no se prohíbe con más contundencia y celeridad?
Porque esto dañaría profundamente la economía de los gigantes laboratorios cosméticos. Por lo que, se acota, de forma paulatina por una cuestión puramente comercial. Y mientras tanto, en el otro lado de la balanza, quedan los hospitales, con sus unidades de oncologías colapsada, con edades cada vez más tempranas, familias devastadas, por una enfermedad que nos acecha como una plaga. Dermatología, otra unidad saturada donde, cada día, las pieles presentan más desajustes graves, más afecciones, más brotes auto-inmunes, y con la población joven que presenta graves problemas hormonales, de infertilidad,… Mientras seguimos preguntándonos, -a veces sonando a ironía: ¿por qué?
Por suerte, cada año se refleja una creciente demanda de productos más seguros y una mayor transparencia en la industria cosmética. La población consumidora está cada vez más informada y exige alternativas libres de tóxicos. Esta situación está llevando a cambios significativos en las regulaciones y prácticas de formulación de productos cosméticos.
Pero sólo la población puede lograr este cambio ¿por qué? Pues porque es a la única que le interesa realmente. Estas regulaciones no interesan a las grandes marcas cosméticas porque la gran ventaja de los conservantes químicos son los bajos costes, que se traducen en mayores beneficios. Tampoco interesa a las superficies de venta de cosméticos, por el recorte de márgenes económicos; y, en definitiva, sólo preocupa a las consumidoras, junto a pequeñas empresas que luchamos contra un sector insano, que pretende confundir a la población para evitar la debacle de los químicos, frente a los productos naturales, de cultivo biológico y claramente más saludables.
Y es que, al elegir productos cosméticos, es crucial considerar no sólo la efectividad de los conservantes, sino también su impacto en nuestra salud y en el medio ambiente. Los conservantes naturales ofrecen una alternativa segura y sostenible a los conservantes sintéticos, aunque pueden requerir un compromiso en términos de duración, precio y formulación. Optar por cosméticos naturales, con conservantes derivados de fuentes naturales, es una elección consciente que puede contribuir a un bienestar general mayor, preservar la salud propia, la de nuestros seres queridos y, por supuesto, a la protección del entorno.
¿Y es imprescindible utilizar conservantes?
Absolutamente SÍ. Un aspecto crucial de la formulación de productos cosméticos es la conservación. Los conservantes son esenciales para prevenir el crecimiento de microorganismos y prolongar la vida útil de los productos, ya que un cosmético sin conservantes tardaría minutos en comenzar a generar patógenos y bacterias indeseables en su interior. Sin embargo, no todos los conservantes son iguales. En este artículo, estamos explorando las diferencias entre conservantes naturales y no naturales, y por qué es importante elegir opciones más seguras y saludables.
Conservantes Naturales
Los conservantes naturales se derivan de fuentes naturales como plantas, minerales o ingredientes biológicos. Estos conservantes no son agresivos y sí más respetuosos para la piel, incluso actúan como activos tratantes y efectivos para el cuidado personal, lo que los hace una elección óptima para quienes buscan productos más saludables y ecológicos.
Algunos Conservantes Naturales que puedes encontrar en tus formulas saludables:
- Ácido Sórbico (Sorbic Acid): Se encuentra de forma natural en las bayas del fresno de montaña (sorbus aucuparia) y muchas frutas. Lo verás en la lista de ingredientes así, o como sus sales de Sorbato de Potasio (Potassium Sorbate): Es efectivo contra hongos, levaduras y moho. Tiene propiedades antimicrobiano y antifúngico. Comúnmente utilizado en productos alimenticios y cosméticos.
Puedes comprobar su seguridad en el Dictamen científico sobre la reevaluación del ácido sórbico (E-200), sorbato potásico (E-202) y sorbato cálcico (E-203) como aditivos alimentarios.
Ten presente que cuando un conservante es apto para consumo ingerido y todas sus pruebas demuestran que es seguro para la salud, nos garantiza, por ende, que en la aplicación en piel, la seguridad está más que garantizada - Ácido Cítrico (Citric Acid): Derivado de frutas cítricas como limones y naranjas. Actúa como antioxidante y ayuda a ajustar el pH de los productos cosméticos, mejorando su estabilidad y vida útil.
- Ácido Láctico (Lactic Acid): Fermentación de carbohidratos por bacterias lácticas que, además de ser un conservante natural, actúa como exfoliante suave y regulador del pH en productos cosméticos.
- Ácido Ferúlico (Ferulic Acid): Encontrado en las paredes celulares de plantas como el arroz y el trigo, es un potente antioxidante que ayuda a proteger los productos cosméticos de la oxidación.
- Aceite de Coco Fraccionado (caprylic/capric triglyceride con Caprilato de Glicerilo (glyceryl caprylate) Derivado del aceite de coco que posee propiedades antimicrobianas y emolientes que ayudan a mantener la estabilidad de los productos cosméticos.
- Ácido Dehidroacético (dehidroacetic Acid): Este conservante se encuentra a menudo en combinación con el alcohol bencílico. Es eficaz contra una amplia gama de bacterias, levaduras y mohos, y es muy bien tolerado por la piel.
- Neem: Semillas del árbol de neem (zzadirachta indica), originario de la India. Este aceite posee propiedades antimicrobiano y antifúngico, se utiliza en productos para el cuidado del cabello y la piel.Semilla de Pomelo: Conocido por sus propiedades antimicrobianas, este extracto es eficaz contra bacterias, hongos y otros microorganismos.
- Árbol de Té: Este aceite esencial tiene propiedades antifúngicas y antibacterianas, lo que lo convierte en un conservante eficaz en productos cosméticos.
- Vitamina E (Tocoferol): Además de ser un potente antioxidante, la vitamina E ayuda a prevenir la oxidación de los aceites en las formulaciones cosméticas.
Ácido Benzoico (Benzoic Acid): Se encuentra de forma natural en muchas plantas, como los arándanos y las ciruelas. Tiene propiedades antimicrobiano y antifúngico, por eso se utiliza en productos cosméticos y alimentarios.
Puedes conocer más de él en la biblioteca médica del Centro Nacional de Información Biotecnológica
- Benzoato de Sodio (Sodium Benzoate): Naturalmente presente en frutas y especias, este conservante es efectivo contra bacterias y hongos. Es especialmente útil en productos con pH ácido.
- Romero: Este extracto no sólo actúa como antioxidante, sino que también tiene propiedades antimicrobianas.
- Leucidal (Fermento de Rábano): Un conservante antimicrobiano derivado de la fermentación del rábano por bacterias de ácido láctico, es suave y eficaz.
- Alcohol Etílico (Etanol): Utilizado en muchas formulaciones de cosméticos naturales, especialmente en productos como perfumes y tónicos, donde el alcohol actúa como un conservante eficaz contra bacterias y hongos.
- Gluconolactona: Un polihidroxiácido (PHA) que, además de sus propiedades exfoliantes y humectantes, ofrece beneficios como conservante. Es efectivo contra un amplio espectro de microorganismos y es suave para la piel.
Conservantes NO Naturales
Los conservantes no naturales, también conocidos como conservantes sintéticos, son compuestos químicos desarrollados en laboratorios. Si bien son altamente efectivos para prolongar la vida útil de los productos y muy baratos para la industria cosmética, están muy cuestionados debido a su potencial toxicidad y efectos adversos sobre la salud.
Ejemplos de Conservantes No Naturales que debes evitar en tus cosméticos para salvaguardar tu salud:
- Parabenos (Metilparabeno, Propilparabeno): Comúnmente utilizados debido a su eficacia y bajo costo, los parabenos están asociados con el cáncer y la alteración endocrina.
- Formaldehído y Liberadores de Formaldehído: Estos conservantes, que liberan formaldehído con el tiempo, son conocidos por ser carcinógenos y pueden causar, entre sus efectos menos graves, irritación en la piel y tendencia a pieles atópicas o reactivas.
- Fenoxietanol: Utilizado ampliamente en la industria cosmética por su bajo coste y su efectividad, este conservante puede causar reacciones alérgicas y problemas del sistema nervioso central.
- Triclosán: Un agente antimicrobiano que se encuentra en muchos productos de cuidado personal, ha sido vinculado a la resistencia bacteriana y efectos hormonales negativos.
- BHA (Butilhidroxianisol) y BHT (Butilhidroxitolueno): suelen aparecer en la formula como BHA (Butylated Hydroxyanisole), BHT (Butylated Hydroxytoluene) Ambos son antioxidantes sintéticos, usados para prevenir la rancidez en cosméticos. Se han asociado con efectos disruptores endocrinos y posibles efectos cancerígenos.
Estos conservantes son legales y permitidos en ciertas concentraciones en productos cosméticos, pero su uso ha sido objeto de debate y revisión por reguladores y grupos de consumo, debido a las preocupaciones mencionadas y sobre todo porque si un cosmético tiene un porcentaje máximo permitido para garantizar la salud ¿qué ocurre si la persona consumidora, se aplica dos, tres o más cosméticos en su rutina diaria? Es fácil regular un porcentaje máximo en las formulas aisladas de los cosméticos, pero es imposible garantizar que una persona sólo aplique un cosmético diario con ese porcentaje, lo cual significa que indiscutiblemente en nuestro cuerpo se supera diariamente la dosis segura.
Comparación y Elección Consciente
La principal diferencia entre los conservantes naturales y no naturales radica en su origen y sus efectos sobre la salud. Mientras que los conservantes naturales son más suaves y seguros, los conservantes no naturales, aunque efectivos, pueden presentar riesgos significativos y muy graves para la salud.
Ventajas de los Conservantes Naturales:
- Menos probabilidad de causar irritaciones y alergias.
- Menor impacto ambiental.
- Menor riesgo de toxicidad a largo plazo.
- Mayor salud para la piel y la vida.
Desventajas de los Conservantes Naturales:
- Menor vida útil en comparación con los conservantes sintéticos.
- Pueden requerir concentraciones más altas para ser efectivos, lo que puede afectar al precio de la formulación del producto.
- Obliga a las empresas a hacer tiradas más cortas de unidades con mayor rotación.
- Obliga a las empresas a cuidar más las condiciones de temperatura e higiene de los envases y cosméticos.
Ventajas de los Conservantes NO Naturales:
- Alta eficacia en bajas concentraciones.
- Prolongan significativamente la vida útil de los productos.
- Precios significativamente más bajos.
- Permiten a los laboratorios hacer producciones de millones de unidades aunque se vendan a lo largo de muchos años.
- No obliga a las firmas a mantener una mayor higiene de envases, instalaciones, ni condiciones de temperatura.
Desventajas de los Conservantes NO Naturales:
- Potencial de causar reacciones adversas en la piel.
- Asociados con riesgos de salud a largo plazo, (alteración hormonal, Cáncer,…)
- Impacto negativo en el medio ambiente.
- Graves problemas de salud.
¿Realmente es tan peligrosa la cosmética química y sus conservantes?
Es fácil que la población mire incrédula esta realidad. ¿Cómo puede ser cierto que todo esto esté llenando las estanterías de venta de cosméticos y las paginas web que visito a diario? No puede ser verdad, se dicen muchas personas. Pero ante esto, yo te pregunto ¿crees que podría prosperar una demanda legal a estos grandes laboratorios si no hubiera evidencias científicas que respalden las demandas?
En los últimos años, varias demandas han sido presentadas contra empresas de cosméticos debido a la inclusión de ingredientes cancerígenos en sus productos.
Aquí hay un resumen de algunos de los casos más destacados, y hay muchos mas:
Lawsuits por Relacionadores Químicos para el Cabello:
Miles de mujeres, principalmente de la comunidad afroamericana, han demandado a compañías como L’Oréal y Revlon, alegando que el uso de alisadores químicos para el cabello ha aumentado el riesgo de cáncer de útero. Estas demandas se basan en un estudio del NIH que encontró que las mujeres que usaron estos productos más de cuatro veces al año tenían más del doble de riesgo de desarrollar cáncer de útero en comparación con aquellas que no los usaron. Los demandantes también mencionan otros problemas de salud como fibromas uterinos y cáncer de mama. Puedes ver toda la información pulsando en el reporte realizado por “Reuters” y en el realizado por “Drugwatch“.
PFAS en Productos Cosméticos:
La línea de maquillaje bareMinerals de Shiseido ha sido objeto de una demanda colectiva debido a la presencia de sustancias per- y polifluoroalquil (PFAS), conocidas como “químicos eternos” debido a su persistencia en el cuerpo humano y el medio ambiente. Estos químicos están vinculados a una variedad de problemas de salud, incluyendo cáncer, problemas del sistema inmunológico, y daños en el hígado y la tiroides.
Productos de Protección Solar y Crema Corporal de Neutrogena
Neutrógena ha enfrentado demandas debido a la presencia de benceno en algunos de sus productos de protección solar y cremas corporales. Los demandantes alegan que la empresa no informó adecuadamente a los consumidores sobre la presencia de este químico cancerígeno en sus productos. Pudes ampliar información pulsando aquí.
Grande Cosmetics fue acusada a principios de año de causar daño ocular por vender sueros para el crecimiento del cabello.
Las consumidoras afirman que el suero, que se comercializa para el crecimiento de cejas, pestañas y cabello, contiene cloprostenato de isopropilo (ICP), que, sólo debe usarse bajo supervisión médica, debido a su riesgo de efectos secundarios graves.
Específicamente, los grupos de consumidoras, argumentan que la ICP puede causar daño ocular, incluida la decoloración del iris, pérdida de pestañas y crecimientos en el ojo.
Las demandantes afirman que Grande Cosmetics está al tanto del problema, pero se ha negado a proporcionar algún remedio a la situación.
La demanda colectiva fue la segunda presentada en años anteriores por el problema de un consumidor de California que argumentaba que los productos deberían clasificarse como medicamentos en lugar de cosméticos debido a que contienen ICP y prostaglandinas.
Johnson & Johnson. Indemnizaciones millonarias por su Talco para bebés
JOHNSON & JOHNSON ha enfrentado miles de demandas, ya que su talco para bebés estaba contaminado con asbesto, lo que causó Cáncer de ovario y mesotelioma en los usuarios. En 2018, un jurado de Missouri otorgó más de 4.690 millones de dólares a 22 mujeres que demandaron a la gran firma porque el uso del talco para bebés les causó cáncer de ovario. El resultado: La compañía ha pagado miles de millones en acuerdos y sigue enfrentando demandas adicionales.
Johnson & Johnson (de nuevo) Productos con formaldehído
Johnson & Johnson también enfrentó una demanda por sus productos de limpieza para bebés que contenían formaldehído, una sustancia química que se sabe que causa cáncer. En 2016, la compañía acordó eliminar el formaldehído de sus productos. Resultado: La compañía ha reformulado muchos de sus productos para eliminar ingredientes controvertidos y sigue afrontando demandas millonarias.
Avon. Productos con talco
Avon ha enfrentado demandas relacionadas con el uso de talco en sus productos, similares a las demandas contra Johnson & Johnson. Los demandantes alegan que el talco estaba contaminado con asbesto, lo que provocó cáncer de ovario en las usuarias.
Resultado: Avon ha pagado acuerdos y sigue enfrentando litigios relacionados con estos productos.
Burt’s Bees. Productos con plomo
En 2012, BURT’S BEES enfrentó una demanda alegando que sus productos contenían niveles peligrosos de plomo y otros metales pesados. Aunque Burt’s Bees es conocido por sus productos naturales, los demandantes afirmaron que sus productos de cuidado personal contenían contaminantes peligrosos.
Resultado: Burt’s Bees ha trabajado en mejorar sus procesos de prueba y reformulación para garantizar la seguridad de sus productos, mientras sigue afrontando litigios con demandas multimillonarias.
EOS (Evolution of Smooth) Bálsamo labial
En 2016, EOS enfrentó una demanda colectiva porque sus bálsamos labiales causaban reacciones adversas graves, incluyendo erupciones, sangrado y la aparición de ampollas en los labios y alrededor de la boca.
Resultado: La compañía resolvió la demanda mediante un acuerdo privado multimillonario, acordando ajustar las etiquetas y la comercialización de sus productos para reflejar mejor los ingredientes y posibles riesgos.
Conclusión
La lista de demandas es interminable ¿crees que todo esto se debe a un miedo infundado en torno a la cosmética química y sus conservantes? No, esto es una realidad del sector, de la que no siempre tenemos suficiente información.
Como ya hemos visto, al elegir productos cosméticos, es crucial considerar no sólo la efectividad de los conservantes, ni del cosmético, sino también su impacto en nuestra salud y en el medio ambiente. Es crucial seleccionar conservantes naturales y adecuados que protejan eficazmente el producto y sean aceptables para el consumo final, equilibrando seguridad y eficacia. Por tanto, en nuestra salud tenemos mucho que decir y hay mucho por hacer aún.
Nuestra labor desde Emocosmética, no es solo formular de manera responsable sino también ayudar, informar y proteger al público con la información suficiente como para que cada cual, de manera libre, determine lo que desea hacer con su salud.
En un mundo donde estamos constantemente expuestos a una multitud de productos químicos en nuestros alimentos, aire y productos de cuidado personal, es vital tomar decisiones conscientes sobre lo que aplicamos en nuestra piel. Las recientes demandas contra grandes empresas cosméticas por el uso de ingredientes potencialmente dañinos subrayan la necesidad de ser más críticos y exigentes con los productos que utilizamos.
Numerosos estudios han demostrado que ciertos ingredientes presentes en los cosméticos convencionales, como los parabenos, ftalatos, benceno y formaldehído, pueden tener efectos adversos en la salud, incluyendo riesgos de cáncer y alteraciones hormonales (Dermatology Times) (Breast Cancer Action) (Top Class Actions). Estas sustancias afectan nuestra salud a corto y largo plazo, acumulándose en nuestro organismo y causando daños persistentes.
Elegir cosméticos naturales es la opción más segura para nuestra salud y una manera de apoyar prácticas más sostenibles y respetuosas con el medio ambiente. Los conservantes naturales como el extracto de semilla de pomelo, el aceite de árbol de té y la vitamina E ayudan a preservar los productos de manera efectiva, y también ofrecen beneficios adicionales para la piel y el cabello
RESPONSABILIDAD PERSONAL Y COLECTIVA
Al optar por cosméticos naturales, no solo protegemos nuestra salud, sino que también enviamos un mensaje a la industria cosmética sobre la importancia de la transparencia y la seguridad en los ingredientes. Este cambio de mentalidad puede impulsar a más empresas a reformular sus productos y adoptar prácticas más responsables.
Nuestra piel es nuestro órgano más grande y absorbe gran parte de lo que aplicamos en ella. Por lo tanto, es crucial ser conscientes de los productos que usamos. Al elegir cosméticos naturales, estamos tomando un paso proactivo hacia un futuro más saludable para nuestro cuerpo y para las generaciones venideras. Informémonos, exijamos transparencia y hagamos elecciones que reflejen nuestro compromiso con nuestra salud y el bienestar del planeta.
Optar por la cosmética natural es una inversión en tu salud y un acto de responsabilidad hacia el medio ambiente. ¡Haz la elección correcta y cuida de ti, de tus seres queridos y del planeta!
Fatim Ligioiz Vázquez
CEO y Directora de I+D+i de Emocosmética.
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