Muchas Personas se preguntan cómo puede incidir la Cosmética en el estado de las emociones.
Lo primero que tenemos que tener en cuenta es que en el Mundo existen muchas y muy variadas formas de entender, tanto la Salud como la ausencia de ésta.
Desde nuestra Medicina Occidental y su farmacopea, a veces nos cuesta entender otras visiones de la Salud. Pero no por ello, dejan de ser efectivas. Durante milenios, en todo el mundo se ha curado con remedios derivados de plantas o animales. En África y Asia, el 80% de la población se vale de estos remedios tradicionales, y no por ello, su índice de Mortandad es superior al occidental.
Nos cuesta entender cómo en el Norte de la India o Nepal, los tibetanos exiliados, son capaces de sanar a través de mantras reiterativos o a través de la vibración de un cuenco. O cómo la Medicina Tradicional China divide el cuerpo en canales energéticos que, a través de agujas de acupuntura, equilibran Cuerpo y Mente.
Esto, sin lugar a dudas, nos lleva a cuestionarnos que la Salud y la enfermedad son conceptos más amplios y holísticos de lo que creíamos.
Si tenemos en cuenta las diferentes formas de entender la medicina que hay en el Mundo, descubrimos que hay cientos de principios activos que se utilizan, muchas terapias y técnicas sorprendentes que ayudan al Equilibrio general de nuestro Cuerpo, y sobretodo, al Equilibrio Integral de nuestro Estado Anímico.
Así pues, la labor de Emocosmética es aunar esta información y ponerla al servicio de todos.
Los estudios actuales inciden en que deben desarrollarse las emociones positivas, como el sentido del humor, la autoconfianza, la calma, y la resiliencia -resistencia al dolor emocional-, para evitar los efectos de la llamada triada emocional negativa, formada por la ira, la ansiedad y la depresión que, junto al estrés, predisponen hacia el desajuste multifuncional del organismo, provocando enfermedades y otros trastornos de la salud que se manifiestan en el aspecto físico.
Para lograr estas emociones positivas, la persona debe adquirir habilidades emocionales aprendidas a voluntad, pero para ayudarle en el proceso, haciendo más fácil el camino, disponemos de la influencia positiva de los vegetales, minerales o plantas, y es de ellos, entre otros, de los que nos nutrimos en Emocosmética, para aportar aquello que, de manera positiva, nos encamina a ese equilibrio interno tan deseado.
Actualmente ya nadie discute la penetrabilidad de los cosméticos en nuestro cuerpo, los cuales, por medio de varios métodos naturales, pueden llegar incluso al torrente sanguíneo y extenderse por todo nuestro cuerpo, aportando sus beneficios.
La rigurosidad de nuestras formulaciones y la gran variedad de técnicas que aglutinamos, para generar este mundo de experiencias sensoriales, son las armas principales con las que nos presentamos en este competitivo mercado.
Junto a la formulación natural y responsable de productos, orientados a mejorar la belleza, Emocosmética utiliza un conjunto de prácticas, enfoques y conocimientos diversos, que incorporan terapias basadas en la aplicación de plantas, técnicas manuales, ejercicios aplicados, últimas investigaciones y terapias ancestrales. todo ello, para mejorar el Equilibrio Emocional. Este mayor espectro de acción, optimiza el trabajo que desarrollan nuestros profesionales en sus centros de belleza y bienestar.
Cada persona que acude a un Centro de Estética es porque tiene una situación donde necesita un terapeuta. Nos equivocamos al pensar que cuidar la belleza exterior es un tema menor. La gente quiere estar guapa porque quiere estar sana. En definitiva, la gente quiere estar feliz. Y en este aspecto, los Centros de belleza y Salud, ahora pueden dar respuesta a esta necesidad con un trabajo mucho más amplio y completo.
Cualquiera de las referencias que Emocosmética incorpora, presenta en su fórmula esencias chamánicas, alquímicas, arquetípicas, mediterráneas, o flores de Bach entre otras; además de remedios nacidos de las Medicinas Tradicionales de China, India, Corea o Japón. Un cóctel de sabidurías milenarias que se entrelazan con las últimas investigaciones y las tendencias más novedosas, como las sustancias nootrópicas naturales en sus fórmulas. Estos Compuestos están en auge entre las selectas carteras de las Mentes más brillantes de Silicon Valley (San Francisco). Emocosmética los incorpora entre sus valores indiscutibles; eso sí, utilizando sólo aquellos de origen 100% natural.
Reforzamos también el trabajo profesional con Tratamientos de Belleza que incorporan distintas técnicas tales como la aurículoterapia, el equilibrio de las zonas reflejas del cuerpo, trabajo sobre meridianos energéticos, kinesiología, digitopuntura, hidroterapia, coach, magnetoterapia, técnicas de luz LED de Biofotónica, biointeligencia emocional, el uso de esencias florales y aceites esenciales, el consumo de nutricosmética especializada o la armonización de los cuerpos sutiles por medio de manipulaciones, masajes y aplicación de determinadas esencias de plantas.
Por todos estos atributos, es fácil comprender que Emocosmética, en menos de un año, se haya posicionado como una de las marcas más selectas y valoradas en los entornos profesionales del mundo de la Estética y que podamos encontrarla en centros de elevado prestigio de nuestro país.
Un nuevo concepto de belleza, que aúna lo mejor de la ciencia, la naturaleza y las medicinas ancestrales, con el claro objetivo de preservar la salud en todo su amplio espectro.