Pellizca suavemente una pequeña área de piel, preferiblemente en el dorso de la mano o en la mejilla. ¿Qué buscar? Observa cómo reacciona la piel. Si vuelve rápidamente a su forma original, probablemente esté bien hidratada. Si la piel tarda en volver a su estado normal y ves que se forman pequeñas líneas o “arrugas”, es probable que esté deshidratada.

Prueba de la Textura: Evalúa la textura de tu piel con un simple tacto. ¿Cómo hacerlo? Desliza tus dedos sobre tu piel, especialmente en áreas que tienden a secarse como las mejillas, los codos o las piernas. ¿Qué buscar? Si notas que tu piel se siente áspera, escamosa o gruesa, es probable que esté seca. Si tu piel se siente suave pero aun así muestra signos de líneas finas o se siente tirante, podría estar deshidratada.

Observación después de la Ducha La forma en que tu piel reacciona después de estar en contacto con el agua puede ser un indicador. ¿Cómo hacerlo? Observa tu piel después de ducharte o bañarte. ¿Qué buscar? Si tu piel se siente extremadamente tirante pero suave poco después de secarte, puede estar deshidratada. Si notas que se siente áspera y escamosa, podría ser seca

Prueba de Absorción de Productos La manera en que tu piel absorbe los productos también puede decirte mucho sobre su estado. ¿Cómo hacerlo? Aplica una pequeña cantidad de una crema hidratante ligera como Cuídate o suero hidratante como Constelación Hidra  ¿Qué busca?: Si tu piel absorbe el producto muy rápidamente, puede estar deshidratada y necesitada de agua. Si el producto se asienta sobre la piel o no parece absorberse bien, podría ser un signo de piel seca.

El Vínculo Entre la Hidratación y la Salud de la Piel

Independientemente de los resultados de estas pruebas caseras, es importante mantener una rutina de cuidado de la piel adecuada para tu tipo de piel. Incluyendo siempre la hidratación como elemento esencial. Y por supuesto, ante la duda, pregunta a tu esteticista profesional o tu médico estético, que te dirá inmediatamente qué es lo que necesitas.

Y recuerda siempre que mantener la piel bien hidratada es crucial no solo para lucir bien, sino para mantener una barrera cutánea saludable. Estudios clínicos han demostrado que una buena hidratación puede ayudar a mantener la integridad de esta barrera y prevenir problemas dermatológicos.

Puedes ampliar información técnica en este estudio sobre la barrera cutánea donde vemos la importancia de la hidratación, la barrera lipídica de la piel e incluso cómo afecta el estrés al desequilibrio de ambos factores: